La utilización de residuos de la industria del papel para la fabricación de ladrillos supondría un beneficio económico y medioambiental
Científicos de la Universidad de Jaén han mezclado residuos de celulosa de una fábrica de papel y lodos procedentes de la depuración de las aguas residuales de dicha fábrica con arcilla de construcción para fabricar ladrillos en laboratorio.
El resultado obtenido demuestra que estos materiales de desecho podrían reducir la cantidad de combustible y tiempo empleados en la producción de ladrillos para la construcción
De momento, los prototipos son de pequeñas dimensiones (3 x 1 x 6 cm), aunque el equipo ya ha hecho pruebas con tamaños mayores y los resultados son similares.
El equipo continúa trabajando para buscar el punto de equilibrio entre sostenibilidad y resistencia del material, además de investigar las ventajas de incorporar otros productos, como los lodos de las depuradoras o los residuos que generan las industrias cervecera, olivarera o las que producen biodiesel.