Según las últimas previsiones del sector inmobiliario realizadas por el BBVA, la recuperación de dicho sector se está afianzando y predice un incremento en las ventas de inmuebles, del aumento de la inversión y del precio de la demanda para 2017.
Se prevé el crecimiento de la venta residencial aproximadamente en un 7% en 2017, junto con un avance anual del 2,5% del precio y un crecimiento económico más moderado con respecto al 2016.
Conforme a BBVA, la reanimación del crédito hipotecario está ayudando al aumento de la demanda residencial. En 2016 las nuevas operaciones de crédito a hogares para la adquisición de la vivienda volvieron a crecer. A partir de este momento, la edificación seguirá respondiendo positivamente a los avances de la demanda y de los precios.
Sin embargo, desde el punto de vista de BBVA, existen una serie de factores riesgo que podrían estar limitando la recuperación.
Por un lado, se encuentran factores de riesgo como las incertidumbres originadas por la resolución del Brexit, la nueva administración de Estados Unidos o el aumento del coste de energía. Por otro lado existe la posibilidad de que tengan lugar cambios en la política monetaria provocados por el aumento de la inflación en Europa.
Sin embargo el BBVA constata que de un año a otro han aumentado las transacciones en el mercado inmobiliario gracias a las condiciones financieramente positivas que se han producido.
En general, la industria inmobiliaria respondió de manera positiva durante el año pasado, gracias a que el inventario de vivienda finalizada siguió reduciéndose y los permisos de edificación crecieron.
BBVA destaca el aumento del número de personas en España que adquirieron una vivienda en su comunidad autónoma de residencia y defiende que la adquisición de un inmueble sigue siendo una alternativa de inversión interesante.
Sin embargo, en lo que se refiere a la demanda extranjera, esta se mostró menos dinámica en 2016 que en el año anterior.
En España los extranjeros que más viviendas adquirieron fueron los ingleses. Sin embargo, su peso sobre las transacciones descendió en 2016, seguramente debido a circunstancias del Brexit.
