El sector de la construcción en España y en el mundo se plantea nuevos retos de cara al futuro, los cuales se deben tener muy en cuenta, debido a que estas tendencias no son localizadas si no que se extienden a lo largo y ancho del planeta en gran parte debido al efecto de la globalización.
Además, en este sentido, debemos tener en cuenta que en España se encuentran 7 de las 100 empresas constructoras más importantes del mundo, y que la tendencia en el país es a una asociación global con otras empresas para reducir los riesgos que acarrean los distintos ciclos económicos.
En este sentido, cobrarán especial relevancia factores como el envejecimiento acelerado de la población, que da lugar a un envejecimiento de la fuerza de trabajo, que a su vez da lugar a una creciente escasez de mano de obra, acusada en muchos sectores y notablemente en el sector de la construcción.
Descubre cuánto crecerá el mercado de la construcción en 2019
Según datos del INE, el índice de envejecimiento nacional en España ha aumentado en aproximadamente 20 puntos desde el año 2000 hasta la actualidad.
Además, la reciente encuesta mundial de construcción internacional de Turner & Townsend, refleja que de los 23 de los 43 mercados encuestados padecen la escasez de capital humano, el aumento de los costes, la reducción de la calidad y una productividad deficiente.
Lo cual nos lleva, a que los organismos reguladores, gobiernos y empresas, además de afrontar el reto de incorporar más mano de obra al sector, también deberán modificar la forma en la que se construye hoy en día.
La tendencia se dirige hacia la construcción modular, en Suecia, por ejemplo, el 84% de las viviendas unifamiliares construidas, utilizan elementos de madera prefabricados.
Comparado con EE.UU., Australia o Reino Unido, donde la cifra es solo del 5%; Suecia es prácticamente un líder mundial en cuanto a construcción modular. También destaca Japón, donde alrededor de una cuarta parte de todas las casas nuevas están prefabricadas.
Se espera que esta tendencia aumente un 6% a nivel mundial para 2022. Debido que, se necesita menos mano de obra, el precio de vivienda final es más barato, se reducen costes y se obtiene un aumento de la productividad.
Es decir, un aumento rápido en la fabricación modular fuera de obra será esencial si queremos satisfacer las demandas. En esencia, las obras se parecerán más a un proceso de ensamblaje final, donde los materiales de construcción cobrarán mayor importancia.