El trabajo en equipo en el sector industrial de la construcción como estrategia para «vender» materiales
Siempre se ha dicho que el trabajo en equipo tiene muchos beneficios que pueden favorecer el mejor funcionamiento de la empresa. Y esto es totalmente cierto.
Hay personas que creen que es un mito, pero lo cierto es que el trabajo en equipo puede mejorar de manera significativa la eficiencia de la empresa. Un equipo bien guiado es más dinámico, rápido, eficaz, sabe sobreponer a los problemas y genera confianza.
Tener un buen equipo, motivado y con confianza en una empresa industrial de la construcción está comprobado que mejora el rendimiento de todos y cada uno de los departamentos de la compañía y favorece la alineación entre los mismos. Eso sí, conseguirlo es todo un desafío y requiere de tiempo y dedicación. Esto se debe a que lo inusual del sector de materiales, provoca que la alineación entre departamentos no sea sencilla. Por ejemplo, si pensamos en una compañía que cuenta con departamento de prescripción, departamento comercial y departamento técnico todos sabemos que el «cliente» de cada uno de ellos puede ser distinto y por lo tanto sus necesidades, recursos y planificación también lo sean para poder dar un servicio adaptado a su cliente final. ¿Esto supone que no pueden trabajar en equipo? En lo absoluto.
Tener a la persona equivocada en uno de estos grupos de trabajo podría suponer la disolución del mismo y en consecuencia, problemas en la empresa a mayor escala. Un mal equipo creará un ambiente laboral tenso, en el que nadie estará cómodo y donde el simple hecho de ir a trabajar se planteará como un problema. Esto suele suceder, cuando en el ejemplo anterior, no se establece un proceso comercial con puntos comunes y a su vez que diferencie el alcance del trabajo de cada departamento.
A lo largo de este artículo se recoge una guía con todo lo que se necesita saber para construir equipos de trabajo de alto rendimiento.
¿Qué es un equipo?
Para poder construir nuestro propio equipo, primero, debemos saber que es lo que debería ser. Si después de leer esta descripción, no ves que tu compañía esté identificada, deberemos reflexionar al respecto. Un equipo es un grupo de dos o más personas que interactúan, discuten y piensan de forma coordinada y cooperativa, unidas con un objetivo común. Un grupo, en sí mismo, no necesariamente constituye un equipo.
Un equipo de trabajo es un grupo de personas que trabajan por un mismo propósito, integrando los conocimientos personales de cada uno en función de los objetivos propuestos. Lo que convierte a unas personas corrientes que trabajan individualmente en un equipo con unos propósitos, que han de trabajar de forma conjunta, centrándose en las metas grupales para lograr un objetivo de forma eficaz.
Si lo que se quieres es un equipo efectivo, no es suficiente con reunir a un grupo de personas y hacer que trabajen juntas. Los equipos muchas veces surgen por proximidad, se forman con las personas que tienen mejor relación entre ellas dentro de una organización. Y en ocasiones, si por ejemplo el responsable comercial y de marketing no tienen una buena relación y además consideran que «no se necesitan», habremos perdido la oportunidad de formar un buen equipo que trabaje para alcanzar los resultados esperados a final de año.
Imponer que varias personas trabajen juntas no resultará en un equipo, su trabajo puede funcionar, pero el ambiente laboral no será el idóneo.
La ventaja de los equipos es que están altamente motivados y eso además de por las tareas a realizar, se consigue uniendo a personas que tienen motivaciones comunes, que se llevan bien y que han demostrado que juntas tienen una gran capacidad de resolución y adaptación.
Trabajar en equipo
Todos hemos escuchado que el trabajo en equipo mejora los resultados. Pero ¿Cuál es la razón? ¿Realmente sucede esto?
Sí, los resultados de las empresas se ven incrementados con el trabajo en equipo. Aunque aparte del trabajo en equipo, también es necesario contar con una matriz bien definida y segmentada del mercado y el producto para incrementar los resultados de ventas, entre otros. Esto conlleva a tener claro cual es nuestro objetivo en el mercado, junto con los clientes objetivo y un modelo de negocio bien definido.
La razón es que trabajar siguiendo esta metodología de trabajo en equipo supone tener empleados que trabajan mejor, de una forma más cómoda, alineados y que se motivan recíprocamente de poder estar compartiendo tiempo con las personas de su equipo.
Esto puede parecer a priori un poco extraño, pero en los equipos que realmente funcionan ocurre una cosa que en principio no es sencilla. Esto es que todos aúnan sus esfuerzos por sacar adelante un objetivo común. Ya no son 4 o 5 objetivos individuales (o los que sea que forman el equipo), sino que todos entienden que para obtener un mayor beneficio deben dejar a un lado sus metas e intereses individuales y comenzar a trabajar por lograr una meta conjunta más importante.
Un equipo acaba siendo algo parecido a una unidad familiar, un núcleo formado por personas que comparten la misma filosofía, la misma forma de hacer, que se sienten motivadas e incentivadas, que por el simple hecho de estar juntas, el trabajo les agrada y no tienen ninguna queja.
Las características del trabajo en equipo
Los equipos de trabajo, para funcionar correctamente, deben tener una serie de características deseables. Hay veces que no se dan todas, pero sí la mayoría de ellas y eso es un pre-requisito para el buen funcionamiento del equipo:
- Compromiso – Cualquier miembro del equipo que presente alguna dificultad, se verá apoyado por el resto.
Los equipos reales están dispuestos a hacer todo lo posible para ayudarse unos a otros en cualquier dificultad que se presente. Dado que el “todo” es lo más importante, los miembros actúan como una familia. Imaginemos una obra en la que el jefe de proyecto ha cambiado radicalmente de idea en relación a la solución que se iba a instalar y esto requiere que en dos semanas necesite sobre su mesa toda la documentación, comercial y técnica que los equipos habían preparado a lo largo del mes anterior. Si comercial, marketing y técnico entienden que o dan todos un extra o no sale la obra, significa que existe compromiso.
El equipo siempre debe basarse en conceptos como la lealtad, la alianza o la cooperación.
- Implicación – Está íntimamente ligada con el compromiso, implica el hecho de que nadie puede ignorar los problemas de otros compañeros. Esta falta de compromiso es un mal común en muchas empresas de la industria de materiales.
Para muchas personas, si ocurre un error que no está directamente relacionado con su trabajo. No importa si pueden cooperar en la solución, quieren evitar cualquier responsabilidad que les pueda surgir relacionada con este.
Un equipo nunca puede tener éxito sin la fuerte participación de todos sus miembros.
- Confianza – Para que el equipo muestre implicación, todos los miembros deben confiar unos en los otros.
Esto se conoce como un «entorno psicológicamente seguro». Todos deben sentir que nadie se reirá de sus opiniones y propuestas y que nadie le recriminará algo en el caso de que se haya equivocado, todo lo contario, deben de sentirse apoyados y valorados. Esto implica que si por ejemplo un técnico de marketing, ha visto que las características de producto que se están comunicando, no son las que están generando interés entre los proyectistas, pero son las «impuestas» por el equipo comercial, deberíamos escuchar a esa persona ya que es la que está realmente en el día a día y tiene de primera mano «esos KPI´s» que pueden demostrar interés en internet.
Esto no quiere decir que si hay un problema no se debe discutir, sino que se debe abordar el asunto desde una perspectiva integra, sin insultos ni culpabilizaciones.
- Diversidad – Para que un equipo funcione los miembros de este deben aportar diferentes capacidades y habilidades. No sirve de nada que todos los miembros tengan las mismas habilidades ya que el grupo solo tendría un único punto de vista y no podrían avanzar con dinamismo.
Ejemplo de esto se puede encontrar en los equipos de mejora de la función comercial y marketing .No todos los miembros de un equipo de trabajo ocupan la misma posición ya que seria imposible trabajar correctamente si todos “jugaran de lo mismo”. Necesitaremos comerciales, prescriptores, administración de ventas, desarrollo de producto, etc.
- Cohesión – La unidad es lo que hará que el equipo supere las adversidades. Todos deben esforzarse por garantizar una alta motivación. En este punto, es muy importante que todos tengan empatía y sean capaces de reconocer cuando un compañero puede estar pasando por un momento difícil.
- El grupo por encima del individuo – Una persona siempre tiene metas individuales, eso es innegable. Aun así, una vez que se entra en un equipo, es fundamental que los objetivos grupales estén por encima de los individuales. El grupo puede ayudar a conseguir esos objetivos individuales, pero nunca anteponiéndolos a los grupales.
- Tiempo – No es una característica, pero es importante mencionarla. Ya que un equipo de alto rendimiento no se obtiene de la noche a la mañana. Para crear el vínculo de confianza, los miembros necesitan conocerse entre sí. Es natural que cuanto más tiempo pasen trabajando juntos, mayor será el sentido de pertenencia, esto nos proporcionará unos mejores resultados.
- Sentimiento de pertenencia – El pertenecer a un equipo fortalece el vínculo de unión y pertenencia. Sentir que se forma parte de algo más grande y que en parte, es gracias al trabajo en equipo llevado a cabo por cada uno de los integrantes. Los fracasos o victorias de un equipo son los fracasos y victorias de todos sus integrantes, no fracasa o gana solo unos individualmente, lo hacen todos a la vez.
En apliqa llevamos años formando y asesorando sobre equipos de trabajo en el sector de materiales de construcción, para así poder llevar el trabajo en equipo a un punto más eficiente. Si tienes alguna duda no dudes en contactar con nosotros.
Etiquetas: compromiso departamental, Marketing y ventas, objetivos equipo comercial